sábado, 30 de enero de 2010

Pero si yo lo traía...¿O no?

¡¡Hola!!
Aquí Elena. Hoy quiero contarles una cosa muy curiosa que me ocurrió hace poco. Algunos lo tomarán como un caso serio de amnesia, otros, (como yo) lo verán como algo raro... No sé. Ustedes decidan.
Lo que pasó fue lo siguiente:

El lunes, después de la clase de natación. fui con mi mamá al Super Selectos de Metrocentro.
Como ya van a empezar las clases, tenemos que tener todo preparado, desde los uniformes hasta la comida para el desayuno. Hace tiempo que no como cereal, y precisamente, al justo momento de entrar ¡vimos unas cajas de cereal, de buena marca con el 50% de descuento!  Vamos nosotras, lo compramos, todo yupi. Compramos las cosas que necesitamos, salimos del super y entramos a la farmacia contigua. Yo llevaba el cereal y la bolsa de detergente, pero como en mi maletita cabía el detergente, lo metí ahí en lo que mi madre compraba la medicina.

Lo último que recuerdo del cereal es que pensé: "Esta caja no me cabe aquí, es muy grande", y que metí el detergente en mi mochilita.

Luego, fuimos a comer helado, nos dieron una bola extra, quedamos llenas, salimos de Metro, tomamos la 2C, luego la R3, llegamos a la parada de la Atlacatl, nos bajamos y en eso mi madre me pregunta:
-¿Y tu bolsa?-
-¿Qué bolsa?- pregunto yo aturdida .
-Tu bolsa, la del super. La del cereal.- responde ella extrañada.-
-¿Qué la hiciste?-
-¡!-
-¡La dejé!-
-¿Adónde?-
-No sé. No lo recuerdo-
Y así era.
-¿Cómo se te va a olvidar algo que traes en la mano?-
-¿Lo traía?-
-...-
- No, en serio. No me acuerdo de llevarlo en el bus. De hecho, no recuerdo esa bolsa desde la farmacia, pero estoy segura de que no la dejé ahí... De verdad, no tengo conciencia de andar esa bolsa-
-Qué raro... Yo te vi que te bajaste de la 2 con la bolsa, pero de aquí ya no la traías.-

Pasamos varios días discutiendo sobre el asunto. Y seguimos sin saber qué fue lo que pasó.
Sólo sé que esa bolsa se perdió y que tuvimos que comprar el cereal otra vez..

PD:El cereal es justo el de la imagen de arriba
PD2: Creo que ya sé lo que cierta personita va a decirme...(o sea ¡qué le sucede!)

domingo, 10 de enero de 2010

Hidrofobia


O más bien, "piscinafobia". Y si se quiere indagar más sobre el caso, diré que es una partehondadelapiscina- fobia.
¿De qué demonios hablo y por qué lo hago precisamente hoy?
Bueno... hablo de mi miedo a ahogarme en una piscina de una manera bastante jocosa. Y lo hago hoy, porque, de algún modo, es una manera de desahogarme.

Es que...pasa que yo no sé nadar. Y mañana comienzo clases de natación, porque no puedo permitirme dejar la materia de Educación Física en el "cole". Y voy a ir todos los días. Y a una hora bastante helada, sobre todo en el comienzo del año. Y tengo miedo de hundirme. Y así como está el clima de frío, me da esperanzas de que no haya clases. Pero no debería de darme ese lujo, porque comienzo en el cole dentro de un mes, o sea. ¡tengo que aprender en un mes! Y quiero, pero no quiero ir, y además tengo que ir y...  seguramente.ya les pasé mi ataque de pánico, se desesperaron o no entendieron nada.

Siempre he dicho que mi madre es la culpable de mi pánico, pues ella lo tiene también. Pero no es cierto. La verdad es que no sé qué es lo que me da ese pánico. No recuerdo haber tenido una experiencia desagradable con respecto a eso, exceptuando la vez que estaba en el mar y me fui en un hoyo y el agua me pasó por encima. Pero no, creo que para ese entonces ya tenía el pánico.

En fin...

Realmente podría haber aprendido a nadar a una edad menor, pues en ese entonces no había tanta crisis económica y mis padres podrían haberme pagado perfectamente unas buenas clases, y así no estaría a estas alturas con semejantes angustias y preocupaciones. Pero como el colegio al que iba no tenía piscina, y como pensábamos que iba a estudiar "toda la vida" en ese colegio, no le prestamos atención al asunto. Pero claro, las cosas cambian. y..."camarón que se duerme se lo lleva la corriente"


Fui a clases durante... medio mes, a principios del año pasado, pero fracasé estrepitosamente en la lucha contra el miedo.

Ahora sólo me queda enfrentarme al día de mañana, despedir todas mis esperanzas, armarme de valor y decir:
¡Piscina, allá voy!   

viernes, 1 de enero de 2010

Los deseos y promesas de inicio de año


Es tradición de algunas familias (porque no sé si lo harán todas) y sobre todo, de nosotros, los más jóvenes , al finalizar un año y comenzar el otro, realizar promesas y pedir deseos para el año entrante, Al sonido de las campanadas, griterío y ametralladoras de pólvora que anuncian la medianoche, dice la costumbre que hay que comer doce uvas y pedir doce deseos, para que se cumplan.

 En este año, debido a la crisis económica, en mi casa no hubo uvas para comer. ¿Qué hacer en estos casos? Inventarte tus propios rituales para cumplir tus deseos. Por ejemplo, yo escribí los deseos que se me ocurrieron en un papel, salí al patio, y los quemé. Fue algo divertido, interesante, emocionante, y a mi modo.Lo importante es que uno tenga fe en que se van a cumplir los deseos, y si pasado un tiempo no se cumplen, no desesperarse y estresarse por ello, porque si a uno le pasa eso, la vida misma se pude volver muy ¡obsesiva y desesperante!

En cuanto a las promesas, puede que no se hagan justo al cambio de día, pues normalmente son del tipo "desde el primero de Enero ya no voy a hacer tal cosa" o "a partir del otro año voy a ser de tal modo", y se han hecho en los días cercanos al fin de año o en el transcurso del día. Lo crítico viene, claro, cuando tus distintos familiares te recuerdan tales promesas, y te toca reafirmarlas. Y con ellas pasa lo mismo que con los deseos. no hay que "clavarse" porque pueden volverse una obsesión.
 Es por eso que ahora prometo ¡tratar de no prometer nada!

Y lo más gracioso de estos rituales, es que normalmente los seres humanos, en nuestro interior, al llegar este tipo de ocasiones, nos lo tomamos tan a pecho (o tan a broma, en el caso de algunos) que tendemos a hacer: ya sea deseos imposibles, ¡o promesas irrealizables! ¡Feliz Año Nuevo!

PD:
Ahora que lo pienso, poniéndome en el plano de "todo es posible": ¿será que hay de veras deseos "imposibles" y promesas "irrealizables"?