sábado, 15 de junio de 2013

Así quiero yo




(Esta canción se me ha pegado hoy y se aplica bastante, je, porque definitivamente solo hay una yo :) )

Hay gente que, si viera la siguiente entrada y de qué trata, se escandalizaría diciendo que semejantes declaraciones son demasiado íntimas y personales para hacerlas públicas (He ahí por qué está archivado en “íntimo y personal”) Incluso una parte de mí está viéndome con ojos espantados mientras mis dedos la redactan
Sin embargo, voy a escribirla. Al fin y al cabo uno nunca queda bien con toda la humanidad y es bueno que el mundo conozca de vez e cuando lo que realmente pensás y sentís acerca de … las cosas.

Definir sentimientos no es fácil. De hecho, por eso son sentimientos. Son emociones, cuestiones tan complejas que no están hechas siquiera para ser descritas. Por eso se confrontan con la razón. Porque hay cosas que sencillamente la mente no entiende.

A lo largo de mi vida he pasado por diferentes percepciones de los sentires que nos ocupan en este momento: cariño, amistad y amor. Primero por la evolución de la persona: obviamente tu visión de las cosas cambia a medida vas creciendo. Segundo, y este es un factor exclusivamente mío: soy una persona que se transforma por naturaleza. Seguro, dirán, es que todos cambiamos. Pues sí, pero vo experimento cambios conscientes y bastante radicales cada dos por tres.

Siempre ha sido así. He pasado de ser una ratoncita tímida a una serpiente enfadada o un león malhumorado o a una flor marchita o a un brillante sol muy a menudo. A veces me pasa varias veces al día. Puede que saque mi fuerza, puede que no… y siento que con cada persona soy alguien diferente.

Algunos lo consideran debilidad, otros fortaleza, otros simplemente cualidad y  otros inseguridad. Admito que soy insegura en muchos aspectos. Pero así soy yo: cambiante “en lo superficial y en lo profundo” como diría la Negra Sosa; pero con una esencia que se mantiene a pesar de todo.

Digo en lo en lo profundo y ustedes se quedan : ¿pero cómo es eso si tu esencia se mantiene? Pues, que mis valores y creencias humanas están siempre ahí, mis sentimientos están ahí, pero cambia mi forma de verlos, evaluarlos y utilizarlos..

Antes, cuando era pequeña y hasta hace relativamente poco, creía que todo 
el mundo prácticamente era mi amigo. Todo el mundo que existía a mi alrededor.
 Quizás era para disipar la sensación de soledad que a veces otorga la unicidad combinada con la primogenitura.

Pero después de largas meditaciones, he logrado establecer cierta escala de cercanía y de cariño. No es que cada nivel sea “mejor” que el otro (ejemplo: no suelo usar el término “mejor amiga”) sino que sencillamente, tiene un papel distinto. En unos hay mayor medida de ciertas cosas, en los otros menor y asi.

Sin embargo, antes de pasar a mi escalado descubrimiento parcial (como ya dijimos mis percepciones evolucionan y cambian) he de dejar claro que un 99 % de las veces siento lo que digo. Trato de ser coherente, aunque algunas veces haga cosas por temor a tu rechazo o finja en alguna medida para “quedar bien”. No obstante, si estamos frente a frente se nota de inmediato o cuando menos, yo me siento asqueada.

Que soy apasionada a la hora de sentir es una gran verdad… pero vamos al grano ya, que me estoy cansando de dar aclaraciones y vueltas:

El cariño es una cosa natural en mí, por lo tanto es realmente difícil que me caigás mal a menos que esté enojada contigo. Y en dichos casos (alguna medida de disgusto o enojo contigo) aunque me sienta chica mala, evadiré tu presencia y tu palabra lo más posible; no soy amiga de enfrentamientos y peleas.

Decir que “me llevo bien con alguien” no significa necesariamente 
un gran nivel de cercanía. Es más bien decir: sí, podemos trabajar juntos, hay simpatía y nos caemos bien… o “no hay choques”.

Por cierto, si en algún momento te digo que me caés bien, al menos en ese fortuito momento, es cierto. Nunca miento cuando lo digo. Lamentablemente, conmigo es más perecedero el “me cae mal”. Me resulta más difícil cambiarte de percepción en ese caso.

Decir que “me llevo” con alguien (nótese la diferencia con la categoría anterior) expresa mucha más cercanía y confianza. En otras palabras, te hablo bastante más. Hay personas que introducen como factor el tiempo, pero en mi caso no necesariamente es así. Podés pasar varias horas diarias conmigo y no necesariamente ser mi compinche y confidente inseparable.

Si te digo que te quiero es cierto… pero ojo con ello: puede ir de lo mínimo hasta antes del “te quiero mucho”, si este no se ha dado aún. Pero denota menos confianza y menos… soltura y comodidad que lo que sigue.

Si te digo que “te quiero mucho” significa que confío en ti, que valoro mucho tu amistad y que te soy lo más leal que puedo.  Prácticamente es ya mi declaración de amistad total J aunque nos fala un “nivel” por especificar.

Si te digo que “te amo” no bromeo con ello: lamentablemente esta frase se ha comercializado, materializado y cerrado mucho a las relaciones de pareja o de noviazgo. Uno puede amar a sus amigos y amigas, sí. Porque amar significa ver la luz en el otro permanentemente y aceptarlo tal y como es. (No AGUANTARLE todo, que es otra cosa) Velar por su seguridad y su felicidad. Que saquen lo mejor de sí recíprocamente, que haya franqueza y perdón entre ustedes.

Las personas que amas te sacan algo tan sublime y tan profundo que no lo sabes explicar, una especie de ternura inexorable y una incondicionalidad casi absoluta, o puede que sin el casi.



Si te digo que te amo, es que daría por ti la vida. Y si vos me lo permitís, lo dirá mil veces al día y te lo demostraré siempre. Decírtelo depende de la apertura que haya en vos también, pero eso sí; si te lo digo tené por seguro que has conseguido mi amistad para toda mi vida.

¿Puedes cambiar de categoría? Sí, lo siento. Y te diré por qué: por la confianza.  Claro, también puedes cambiar de lugar positivamente y quizás quedarte ahí, pero para mí tu lealtad y tu sinceridad son muy importantes.
Si alguno de nosotros dos ha cometido un error, el perdón es importante: tanto tu capacidad de pedirlo como de darlo. Que me pidas perdón por haberme herido vale mucho para mí.


Si alguna vez pierdes mi confianza, es importante que te des cuenta. Te costará volverla a ganar, pero es posible.


No sé del todo por qué publico esto, la verdad. Quizás sea una manera consciente de reconocer mis percepciones y puntos de vista, y ser lo suficientemente valiente como para mantenerme firme una vez salgan a la luz.

Para mí es fácil querer y suele ser difícil porque la mayoría de ustedes quiere en proporción al tiempo de conocimiento. Qué puedo decir, así soy yo. Es yuca, sí, pero como mi querido padrino dice… ¡zóquela!

Puedo parecer simple, pero no lo soy… en fin











1 comentario:

  1. Domo dijo otro externadista,,, si uno escribe, publicar debes... Saludos

    ResponderEliminar